El Terremoto de ATARFE-ALBOLOTE de 19 de Abril de 1956

El fenómeno de los terremotos es tan corriente y habitual como cualquier otro de la naturaleza. Los temblores de tierra se suceden, aunque con otra escala de tiempo, como la lluvia, el viento, la nieve, el granizo, etc. Si analizamos la Sismicidad mundial se produce un terremoto aproximadamente cada medio minuto lo que nos indica el número tan elevado de eventos a lo largo de un año, y además, nos pone de manifiesto que no todas las zonas de la tierra tienen el mismo número de temblores. La mayoría de ellos, pese a su elevado número, pasan desapercibidos para los hombres pero quedan registrados en los modernos aparatos desarrollados por los investigadores. Con estos registros se recogen datos que permiten su estudio, análisis e investigación. El conocimiento de estos sismos ha dado lugar a la Sismología. Los sismos ocurridos hace tiempo se enmarcan en la Sismicidad Histórica pues carecemos de registros para su estudio y nos tenemos que servir de los documentos de Archivo y otras fuentes impresas. Estos estudios usando registros sísmicos son relativamente modernos y pocos centros en el mundo pasan o se acercan al centenar de años de funcionamiento.

Las zonas donde abundan más este tipo de fenómenos son las orillas del Mediterráneo, riberas del Pacífico, Oriente Medio, la India, China y el Caribe. Tras ellos se constatan los efectos de las sucesivas sacudidas terrestres: epidemias, incendios, muertes de hombres y animales, pérdidas económicas sobre todo en las viviendas y el Patrimonio. El hombre a través del tiempo ha ido tratando de dar una explicación sobre tales fenómenos con lo que se han ido formando leyendas, explicaciones racionales y tratados. Plinio decía que “donde la Tierra ha temblado, volverá a temblar otra vez”. La Biblia, el Cristianismo y el Islam dan una explicación divina a los terremotos y achacan a los pecados de los hombres este tipo de eventos. Esta mentalidad perduró hasta el siglo XIX en que comienzan a darse explicaciones racionales y científicas sobre los sismos. Uno de los más cercanos a nosotros en el tiempo por la importancia que tuvo es el que estudiamos en este trabajo. Muchos recuerdan todavía aquellos días en que la naturaleza parecía confabularse contra los hombres.

El sismo de Albolote-Atarfe del 19 de Abril de 1956 es de los más importantes del siglo XX en España y se enmarca dentro de los terremotos destructores junto a del 16 de Junio de 1910 en Adra, los granadinos de 1911 (Atarfe, Pinos Puente, el Jau, Láchar, Huetor Tajar y Granada), el de 5 de Julio de 1930 en Montilla, el de 5 de Marzo de 1932 en Vícar (Almería), los de la provincia de Jaén de 1951 en Andújar, Bailén y Linares y el del 9 de Junio de 1964 en Galera y Orce. El terremoto afectó a una amplia zona y sus efectos fueron estudiados por investigadores reconocidos como el Padre Antonio Due Rojo, Juan Sancho de San Román, Juan Bonelli Rubio, Luis Esteban Carrasco y más recientemente por Francisco Vidal Sánchez.

Todos ellos con mínimas diferencias nos dicen que el temblor comenzó a las 18 h. 38 m. y 53 s. (TMG) y sembró el pánico sobre todo en la zona comprendida entre Sierra Elvira y Granada alarmando a casi toda la provincia. La Prensa del día siguiente citaba como arruinadas las poblaciones de Atarfe y Albolote, y muy afectadas Santa Fe, Maracena y algunos barrios de la capital. Estos solicitaron ayuda al Gobierno. Las coordenadas epicentrales son 37.26 N, 3.73 W, profundidad 6±3 Km, magnitud 5.0 e intensidad VIII en Albolote y Atarfe. Las pérdidas humanas sumaron 7 muertos directos y 5 debidos a un deslizamiento de tierras junto al Beiro en Granada por el derrumbamiento de una cueva, situada junto al camino de la Casería de Montijo. Como consecuencia del terremoto y los efectos de la lluvia se hizo una gran grieta en la ladera. El día 20 de abril a las dos de la tarde se produjo la caída de unos 5.000 m3 de tierra. En la cueva vivía un matrimonio con 3 hijos, murieron todos. En este mismo lugar en 1945 otro deslizamiento produjo 4 muertos. Ademas se habla de unos 40 heridos, varios centenares de viviendas destruidas, otras muchas inhabitables, graves averías y daños materiales por importe de 20 millones de ptas. (de la época). Uno de los heridos murió el día 25. El número de muertos es aumentado por Pastor al decirnos que fueron 13 muertos y 73 heridos. Estos daños se vieron aumentados por las numerosas réplicas que siguieron durante varias semanas. Nos dice el P. Due (director por entonces del Observatorio de Cartuja) que el epicentro se sitúa entre Albolote y Atarfe, zona que carece de poblados y de cultivos, por lo que los daños no se vieron aumentados.

Imagen en la que se muestra el alcance del terremoto de Atarfe-Albolote del 19 de Abril de 1956 en un mapaEn un radio de 10 Km alrededor alcanzó el grado VII con lo que abarca la capital y una veintena de pueblos de la Vega. Tuvo una escasa profundidad focal.

El terremoto es descrito por el P. Due diciéndonos que él se encontraba en el segundo piso de la Facultad de Teología y que duró unos cuatro segundos, violento, produciendo en la juntas de los muros y ventanas grietas y desprendimientos de yesones, caída de objetos, relojes parados, etc. Tras sus investigaciones alude a que en Albolote sufrieron más las paredes orientadas de E-W, grietas en columnas de la iglesia, desprendimiento de rocas en Sierra Elvira, ruptura y caída de chimeneas, cornisas, movimiento de árboles, ruido subterráneo general notado en poblaciones bastante alejadas. Alude a fenómenos extraños descritos por la población como corriente de aire, fuego y piedras procedente de la Cañada llamada Tajo Colorado que parecía salir de la Raja Santa aunque un Grupo de Espeleólogos Granadinos lo desmentía en la Prensa. El P. Due había realizado otras encuestas con motivo del terremoto ocurrido el 4 de Junio de 1955 que afectó a Atarfe y produjo daños materiales, algunas personas dicen que vieron un resplandor de globo rojizo amarillento en las primeras horas de la mañana. Distingue los edificios bien y mal construidos, habla de casas europeas y no europeas, coherencia o trabazón de las partes entre sí (vigas, tabiques, cielos rasos), materiales empleados, unión de las piedras de mampostería, ladrillos cogidos con mortero, etc.

Pastor achaca los destrozos a la mala calidad de las construcciones y a la escasa coherencia de los materiales. Tras analizar los emplazamientos afectados es de la opinión de que se había exagerado en las estadísticas oficiales cuando se decía que el 30% de las viviendas habían quedado prácticamente destruidas, el 60% con daños considerables respecto a Albolote, el 5% destruidas y el 40% con daños importantes en el caso de Atarfe. Este autor dice que él no había realizado el recuento pero cree que se ha exagerado un poco en las encuestas y documentos. También habla de los desprendimientos que tuvieron lugar en el Tajo Colorado en las inmediaciones de Sierra Elvira y los achaca a la existencia de un mal saneamiento de la cantera y a la inestabilidad de los bloques.

Las réplicas fueron estudiadas por el P. Due comenzando por la de las 20 h. 0 m. y 28 s. y dada su proximidad al Observatorio fue difícil de registrar pues la velocidad de rotación de los cilindros era de un cm. por minuto. Las réplicas se suceden unas a otras. Las mas importantes se registraron entre los días 19 al 30 de Abril y los 8 primeros días de Mayo. En algunos días ocurrieron varias sacudidas más o menos fuertes. Estudió y registró 116 réplicas importantes.

Los estudios realizados por D. J. Sancho de San Román, J. Bonelli y L. Esteban nos permiten saber con exactitud los efectos del sismo sobre las poblaciones más afectadas. En resumen fueron los siguientes:

  1. Atarfe. Población de 8.000 habitantes y 1.500 casas. Objetos sueltos caídos igual que algunos muebles. Los edificios buenos sufrieron daños y de todos ellos quedaron 600 con grietas reparables, 600 con daños considerables, 200 ruinosos y 10 destruidos. Algunas fachadas derrumbadas al W, muros arruinados junto a la estación del ferrocarril. Los efectos del sismo se ven patentes en una fotofábrica de planchas de mármol "Mármoles Prieto-Moreno Ruiz, S. A.", situada frente al pueblo junto a la carretera de Granada. La caseta de un transformador quedó agrietada en sus cuatro paredes de ladrillo. Se citan fenómenos luminosos en el lugar del epicentro.

  2. Albolote. Población de 5.000 habitantes y entre 850-900 casas. Los objetos cayeron al suelo a distancias de un metro de su posición inicial. Los edificios mejor preparados presentan grietas en algunos casos considerables. Los de inferior calidad quedaron inservibles y otros hundidos. Las casas quedaron 350 con grietas reparables, 300 con daños considerables e inhabitables, 50 ruinosas y 7 destruidas. La fachada del Ayuntamiento sufrió la pérdida de un remate con escudo del pueblo. La iglesia perdió parte del alero y la torre presentaba grietas notables. Muchas viviendas perdieron los tejados. Sabemos que hubo 5 muertos en Albolote y Atarfe y más de 60 heridos además de grandes pérdidas económicas por los daños materiales. Las noticias a veces son contradictorias pues los artículos de los especialistas y las aparecidas en la prensa no se ponen de acuerdo totalmente.

  3. Granada. El fuerte terremoto dejo una impresión inolvidable a los que lo sintieron, su intensidad se puso de manifiesto sacando a todos a la calle, el pánico fue general. Objetos caídos, vajillas destruidas, relojes de péndulo parados, caída de una cruz de piedra en la iglesia del Sagrado Corazón y un remate de piedra de la Audiencia. Los edificios buenos solo sufrieron grietas. Los de peor construcción como ocurría en el Albaicín resultaron bastante afectados. En general en este barrio granadino un 10% de las casas fueron desalojadas y las que presentaban grietas alcanza el 50%. Algunas viviendas quedaron ruinosas. En la capital hubo dos muertos y varios heridos. Se pararon los relojes del Observatorio de Cartuja, averías en los sismógrafos y grietas en la rotonda del edificio. En la ciudad todavía hoy muchas personas recuerdan este sismo y hablan de los efectos sobre los raíles del tranvía, las calles se movieron como si fueran pequeñas olas, etc.

  4. Maracena. Población de 4.000 habitantes y 900 viviendas. Cayeron objetos sueltos y muchos edificios quedaron afectados, uno de tapial quedó destruido. En resumen 700 casas con daños leves, 150 con daños considerables y 10 ruinosos. Algunos edificios tenían derrumbadas la parte superior.

  5. Santa Fe. Población de 11.000 habitantes y 2.000 casas. Cayeron todos los objetos sueltos y muchos trozos de chimeneas. En general el 50% de los edificios presentaban grietas y daños leves. En la relación de daños del Ayuntamiento se decía que 70 viviendas tenían daños considerables y 15 estaban en estado ruinoso. la iglesia con daños considerables, el pórtico cuarteado igual que una parte importante de la nave central.

  6. En el Pantano de Cubillas los obreros que trabajaban sobre el dique se tambalearon. El mástil de una torre sumergida 17 metros y 15 sobre el agua osciló, se produjeron ondas concéntricas en el agua. Un obrero cuenta como escuchó antes del terremoto un retumbo que procedía del S. En un pequeño poblado junto al pantano toda la gente salio a la calle y en las viviendas se apreciaban grietas.

  7. Peligros. La alarma fue general, los objetos cayeron y afectó a unas 400 viviendas aunque de forma leve pues solo 50 de ellas tenían grietas importantes y fue necesario evacuar otras 7 casas por peligro de derrumbe.

  8. Pinos Puente. 2000 casas, todo el mundo salió a la calle. En el Ayuntamiento se tomó relación de 12 casas con daños considerables y la mayoría de ellas estaban con grietas leves, se cayeron algunos trozos de chimeneas. Las réplicas del sismo no fueron sentidas por todos.

  9. Belicena. Población de 1.100 habitantes y unas 200 casas. Cayeron objetos, muchos edificios con grietas leves y 4 de ellos con daños considerables quedando además otro ruinoso. Aquí se sintieron todas las réplicas.

  10. Purchil. Población de 1.600 habitantes y 220 casas. Todo semejante a Melicena.

  11. Churriana de la Vega. Alarma general, quedaron afectados los edificios de peor calidad y 5 de ellos presentaban daños considerables. También se sintieron las réplicas más importantes.

  12. Armilla. Todos salieron asustados a la calle, objetos caídos, muchos edificios con grietas y algunos corrales de tapial se vieron afectados cayéndose trozos de la tapia. Se sintieron las réplicas.

  13. Pulianas. Población de 1.600 habitantes y unas 400 casas. Todos salieron a la calle y muchos edificios sufrieron grietas leves aunque se anotaron con daños considerables 12 de ellos y 7 casas quedaron medio arruinadas. también se sintieron las réplicas.

  14. Güevéjar. Población de 1.100 habitantes y unas 250 casas. Alarma general, muchos edificios con grietas leves y 5 con daños considerables. Se sintieron las réplicas.

En el Observatorio de Cartuja se registraron las réplicas ocurridas como efecto del terremoto principal. El mismo día 19 se sintieron tres réplicas de grado V en Albolote y III en Granada. El día 20 se sintieron 15 réplicas que en Granada alcanzan el grado III. Otras 7 réplicas el día 21 y 24 el día 22 que se estiman en grado IV en Granada. Nos dice el P. Due que muchos de ellas se sintieron débilmente pero la gente, que estaba muy sensibilizada se alarmaba. Continuaron 8 réplicas el día 23, 9 el día 24, 3 el 25, 1 el 26 por lo que en total se contabilizaban 58 del grado I, 7 del II, 4 del III, 1 del IV, 1 del V y 1 del VII. Continuaron 2 el día 28, 13 el 29 y 3 el día 30. Algunos alcanzan el grado IV. Las réplicas continuaron hasta finales de Junio en que se registraron pequeños enjambres de terremotos.

Para localizar el epicentro, magnitud y energía se hizo un estudio analítico tomando datos de los Observatorios de Cartuja, Málaga, Almería, Toledo, Alicante, Lisboa y Tortosa. Tras un detenido examen de los datos sitúan el epicentro inmediato a Atarfe. La comarca es bien conocida y pertenece a la comarca sísmica granadina cuya vega es atravesada por el Genil. La gran sismicidad de la zona se debe a que es una zona de contacto entre las Serranías Subéticas y Penibéticas (según Due y otros). Este terremoto fue sentido en una amplia zona como se puede apreciar en el mapa de las isosistas elaborado por J. Bonelli y L. Esteban Carrasco que insertamos junto a algunas fotografías de la época.

Finalmente podemos indicar que este terremoto tuvo una magnitud moderada, alcanzó mayores efectos de los esperados para este tipo de eventos. Las causas de esta mayor cantidad de daños pueden deberse a diversos factores ya apuntados anteriormente: escasa calidad de las construcciones y efectos de amplificación por el tipo de suelo que nos encontramos en la Vega de Granada. Este terremoto nos debe de servir para prevenir los males futuros, porque muchos de los efectos de los terremotos, hoy por hoy, pueden ser evitados.